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| Los Reyes Magos |
En la Biblia no abundan las referencias sobre el origen, los rasgos, los nombres de
los Reyes Magos, que fueran tres, ni que estos fueran reyes. Es en el
Evangelio de San Mateo (Mt 2, 1-12) donde se narra que unos Magos vinieron de Oriente buscando al nuevo rey que habría de nacer.
Los nombres de los tres reyes magos,
Melchor, Gaspar y Baltasar, aparecen por primera vez en el mosaico de
San Apollinaire Nuovo (Rávena), datado en el siglo VI.
La historia
Los Reyes Magos, guiados por una estrella, buscaban al "rey de los judíos que ha nacido" en Jerusalén. Siguiéndola, llegaron hasta Belén donde había nacido Jesús, a quien realizaron ofrendas de oro, incienso y mirra.
Durante su viaje, encontraron en Jerusalén al rey
Herodes el Grande, quien les pidió que a su regreso le indicaran el lugar de nacimiento y así poder también ir él a adorarle (su verdadera intención era la de darle muerte:
el origen del Día de los Santos Inocentes), pero un ángel se les apareció y les advirtió del peligro real que corría Jesús, por lo que regresaron siguiendo otro camino.
La celebración
En Occidente la fiesta de
los Reyes Magos se empezó a celebrar en el año 450 cuando
el papa León I el Magno estableció la Epifanía - el día 6 de enero - como la fecha para celebrar esa fiesta.
La costumbre de que
los Reyes Magos lleven regalos es posterior, surgiendo a mediados del siglo XIX.
Las reliquias
Según la tradición, los restos de
los Reyes Magos fueron encontrados por la
emperatriz Elena, madre de
Constantino, en el monte Vaus, identificado con el monte Sabalan (Azerbajan), y fueron
trasladados a Constantinopla.
A partir del siglo IV las reliquias de
los Reyes Magos se encontraban en la
iglesia de San Eustorgio, en la ciudad de Milán, traídas por San Eustorgio desde Constantinopla cuando el emperador aprobó su nombramiento como obispo de Milán. El obispo Eustorgio habría decidido construir un nuevo templo para guardar las reliquias de
los Reyes Magos en el lugar donde se pararon inexplicablemente los bueyes que arrastraban el carro que las trasladaba hasta la Catedral de Milán.
Posteriormente, a mediados del siglo XII,
Federico I de Hohenstaufen "Barbarroja", emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, invadió la ciudad y se apoderó de las reliquias, trasladándolas a la
antigua catedral de la ciudad de Colonia (Alemania), donde entraron el 23 de julio del año 1164 de la mano del arzobispo
Reinaldo de Dassel.
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| Relicario de los Reyes Magos. Catedral de Colonia. |
Para guardarlas, el arzobispo
Felipe von Heinsberg - sucesor del arzobispo Reinaldo - ordenó la construcción de una urna que albergara las reliquias. El orfebre
Nikolaus von Verdun inició su construcción en el año 1181 y fue terminada por sus discípulos en el año 1220. Se trata de un relicario de oro, plata y piedras preciosas, en cuyo frontispicio se refleja la escena de la adoración de los Reyes Magos.
La ciudad de Colonia se convirtió en uno de los lugares de peregrinación más importantes de la Edad Media.
En el año 1904,
Colonia devolvió un pequeño fragmento de las reliquias a la Basílica de San Eustorgio, que se colocó de nuevo en la capilla de los Magos, pero no en el sarcófago grande, sino en una teca situada sobre el altar.
.jpg "Momento de la voladura de los budas de Bamiyán por los talibanes - www.historiadelascivilizaciones.com")
%2Bmapa.jpg "Mapa con la situación de Bamiyán (Afganistán) - www.historiadelascivilizaciones.com")
.jpg "El altar de Pérgamo (Berlín, Alemania) - www.historiadelascivilizaciones.com")
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%2B2.jpg "Wadi Dawan - www.historiadelascivilizaciones.com")
%2Bmapa.jpg "Mapa con la situación de Wadi Dawan (Yemen, Oriente Próximo) - www.historiadelascivilizaciones.com")
